Ramón Carillo ó el arte de un mara’akame

Conocí a Don Ramon en el pueblo de El Cuyo, Yucatán donde vino a vender su arte de chaquiras.
El es originario de Jalisco y es parte del pueblo huichol.
Es mara’akame (chamán) y también artista, plasma sus visiones en placas de madera y chaquiras.

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Del nombre

El pueblo huichol se llama a sí mismo Wirrárika o Wirraritari (en plural). No hay certidumbre acerca de si la palabra huicholes proviene de una deformación del término Wirrárika.

Lengua

El huichol está emparentado con el náhuatl, y junto con el pima, el yaqui, el cora y el tepehuano, forman parte de la familia yuto-azteca. El cora y el huichol forman un subgrupo dentro del grupo sonorense de la rama meridional. Los huicholes utilizan la expresión tewi niukiyari, que significa "palabras de la gente", para designar a su propia lengua. El huichol contiene préstamos importantes del náhuatl y del español.

La destreza en la expresión es muy importante para su vida en colectividad. La lengua tiene una dimensión sagrada que se manifiesta en los cantos de Tsaurírrika (el cantador) y en las expresiones cifradas que ahí aparecen.

Localización

Los huicholes habitan en los municipios de Mezquitic y Bolaños, al norte del estado de Jalisco, así como en La Yesca y el Nayar, en el estado de Nayarit. Algunos grupos minoritarios se localizan en los estados de Zacatecas y Durango.

En Nayarit, la población huichola se asienta de manera dispersa y conviven con coras y mestizos; para los huicholes de Jalisco, por el contrario, ha sido importante impedir el asentamiento de mestizos al interior de sus comunidades.

Antecedentes históricos

El origen de los huicholes es incierto, aunque se han elaborado algunas hipótesis basadas en datos lingüísticos, mitológicos y arqueológicos. Al parecer, los ancestros de los huicholes mantuvieron una vida independiente de los grandes imperios. Los mitos hablan de cómo los antepasados huicholes eran atacados por águilas y jaguares en sus peregrinaciones a la tierra del peyote.

Es probable que entre los ascendientes de los huicholes hubiera algunas tribus teochichimecas (indios del norte), ya que, en el Códice Florentino de fray Bernardino de Sahagún se describe un ritual de los teochichimecas, parecido al que realizan los huicholes con el peyote.

La tradición oral narra cómo los dioses salieron del mar y fueron peregrinando hacia el oriente de la sierra, de manera que también es probable que algunos grupos de las tierras bajas de la costa se hayan mezclado con los antepasados huicholes en distintas épocas.

Economía y producción artesanal

La mayor parte de grupos huicholes de Jalisco, habitan en la región del río Chapalagana, el estado de Jalisco, de accidentada topografía y amplia variedad de climas. Las superficies cultivables son escasas debido a la inclinación del terreno. Las áreas boscosas de la región son, en su mayoría, explotadas por compañías del estado de Jalisco con beneficios mínimos a la población local por concepto de la explotación forestal, mientras que su vida se ha visto afectada por la erosión de los suelos.

Las actividades productivas son básicamente para el autoconsumo: agricultura, pesca y caza, especialmente de venado. Los cultivos principales son el maíz, la calabaza, el amaranto, el frijol y el chile. Para labrar la tierra se sigue utilizando el sistema de estacas y cuando el terreno lo permite se trabaja con yunta de bueyes. Todas las tierras de labor son comunales.

Entre los huicholes hay una importante migración temporal, por lo que su vida religiosa, política y económica está organizada de tal modo que pueden trasladarse de un lugar a otro y regresar para tener participación en esos importantes aspectos de la vida.

La expresión artística Huichol reflejada en su producción artesanal se caracteriza por el simbolismo religioso que plasman en la enorme variedad de objetos rituales y artefactos tradicionales, en los diseños textiles y de sus atavíos y en la construcción de templos e instrumentos musicales.

Otro tipo de expresión artística verdaderamente significativo es el uso de cera de Campeche y estambres multicolores sobre cuadros de madera de distintos tamaños en la creación de imágenes que reflejan su cosmogonía, mitos y leyendas; la historia de la creación; también fabrican piezas tridimensionales sirviéndose de guajes, violines y formas animales labradas de madera en las que untan una capa de cera para después decorar con impresionantes patrones hechos con pequeñas chaquiras brillantes y multicolores. Estos artefactos se comercializan, pero algunos reflejan experiencias religiosas y se destinan a los rituales.

Cosmogonía y religión

Los huicholes tienen su propia concepción sobre su origen e historia, con una significación cósmica. La historia "cósmica o verdadera" se encuentra plasmada en los mitos, en el arte y en todas las manifestaciones simbólicas del pueblo.

Los mitos son el modelo de todas las acciones que tienen sentido en la sociedad. Es por eso que el hulchol siembra, caza y participa en las mismas ceremonias de sus antepasados, el mundo tiene una dimensión sagrada que es considerada de gran poder y cuya manipulación está a cargo de especialistas como los mara'akate (plural de mara'akame), quienes por medio del sueño penetran en el mundo de los dioses estableciendo un nexo entre lo sagrado y lo profano.

Una de las características principales de su religión es la asociación que se da entre el maíz, el venado y el peyote. Su mitología en general hace referencia a estos elementos, por lo que los rituales, las fiestas, la organización material y temporal de la vida gira muchas veces alrededor de ellos. El maíz y el venado representan el sustento vital, en tanto que el peyote es el medio más importante para trascender el mundo profano y la manifestación material más obvia de lo sagrado. Los dioses son considerados como antepasados, en tanto que los parientes muertos pueden llegar a ser semidivinizados, de manera que la muerte establece un lazo más con lo sagrado. Sus cinco centros ceremoniales en donde se instalan los gobiernos tradicionales, se encuentran en: San Andrés Cohamiata (Tateikie), Santa Catarina Cuexcomatitián (Tuapurie), San Sebastián Teponahuaxtlán (Wautia) y Tuxpan de Bolaños (Tutsipa) en el estado de Jalisco, y Guadalupe Ocotán (Xatsitsarie) en Nayarit.

Salud

Para los huicholes, la enfermedad puede tener como causa la falta de responsabilidad hacia los dioses, el maleficio o el extravío del alma. En el primer caso, se deben dar ofrendas y cumplir con los requisitos exigidos por los dioses a través del mara'akame o shamán; cuando la enfermedad es originada por un maleficio, el mara'akame es quien "limpia" al enfermo con plumas, rociando humo de tabaco sobre su cuerpo y succionando con la boca el objeto extraño causante del mal. Cuando el kupúri, parte del alma del individuo que se localiza en la parte superior de la cabeza, se extravía dejando a la persona en un estado grave, la función del mara'akame es buscar el kupúri para colocarlo en el lugar que le corresponde; en caso de que el kupúri sea robado por algún brujo, el mara'akame debe enfrentarse con él para recuperarlo.

Los huicholes distinguen dos tipos de enfermedades: las originarias de la sierra y las traídas por los españoles. Las primeras forman parte de su cosmovisión, su curación requiere de la medicina tradicional; en cambio, las segundas deben ser tratadas con los médicos.

Fiestas

Las ceremonias más importantes de los huicholes se relacionan con el ciclo agrícola (maíz o peyote), con la vida política o con el ciclo cristiano. Una de ellas es la fiesta del maíz tostado, que es paralela al desmonte y quema de los terrenos. En este ritual se manifiesta la unión de los tres elementos centrales de su religión: el maíz, el venado y el peyote. Las fiestas de las primeras mazorcas tienen una gran importancia para la permanencia cultural de los huicholes, pues en ellas el mara'akame relata un viaje a la tierra de Wirikuta; de esta forma los niños, presentes en el ritual, interiorizan la geografía religiosa del grupo.

Otras fiestas que se llevan a cabo en la región son las que preceden a las lluvias, que están dedicadas a las diosas de la tierra, del maíz y del crecimiento. El mara'akame canta durante varias horas los mitos correspondientes. En tiempo de sequía se realiza la peregrinación a Wirikuta, la tierra del peyote, considerada como un lugar sagrado donde moran los dioses. Allí recolectan peyote para las ceremonias y hallan a los dioses para "encontrar la vida".

Las otras fiestas que celebran son las ceremonias sincréticas (ciclo cristiano) y las que están relacionadas con la organización política, principalmente con el cambio de varas.

Organización social

El actual sistema de autoridades tradicionales de los huicholes es una mezcla de la organización prehispánica del grupo y de la impuesta por los misioneros.

Dentro de estas autoridades se encuentran los kawiteros (ancianos), quienes han cumplido con las obligaciones civiles y religiosas de la localidad, además de ser conocedores de la tradición del grupo, por lo que son las personas más respetadas de la comunidad.

Al kawitero le corresponde elegir a los funcionarios del gobierno tradicional, el cual se renueva cada año en una ceremonia de cambio de varas o bastones de mando que se realiza en enero.


Nota: Resumen realizado básicamente con información del sitio oficial: http://www.cdi.gob.mx


Fuentes secundarias:

  • Registro FODAER 1883 Los Huicholes, Ediciones de la Casa de la Cultura Jalisciense, 01 de Enero, 1970. http://132.248.82.60/fodaer

  • Registro FODAER 1337 México Indígena, Núm. 43, octubre y Núm. 45, diciembre de 1980. http://132.248.82.60/fodaer

  • Zingg, Robert M, Los Huicholes tomo II, Instituto Nacional Indigenista, México 1982.

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